de que los ha unido un sentimiento repentino.
Es hermosa esa seguridad,
pero la inseguridad es más hermosa.
Imaginan que como antes no se conocían
no había sucedido nada entre ellos.
Pero ¿qué decir de las calles, las escaleras, los pasillos
en los que hace tiempo podrían haberse cruzado?
Me gustaría preguntarles
si no recuerdan
-quizá un encuentro frente a frente
alguna vez en una puerta giratoria,
o algún "lo siento"
o el sonido de "se ha equivocado" en el teléfono-,
pero conozco su respuesta.
No recuerdan.
Se sorprenderían
de saber que ya hace mucho tiempo
que la casualidad juega con ellos,
una casualidad no del todo preparada
para convertirse en su destino,
que los acercaba y alejaba,
que se interponía en su camino
y que conteniendo la risa
se apartaba a un lado.
Hubo signos, señales,
pero qué hacer si no eran comprensibles.
¿No habrá revoloteado
una hoja de un hombro a otro
hace tres años
o incluso el último martes?
Hubo algo perdido y encontrado.
Quién sabe si alguna pelota
en los matorrales de la infancia.
Hubo picaportes y timbres
en los que un tacto
se sobrepuso a otro tacto.
Maletas, una junto a otra, en una consigna.
Quizá una cierta noche el mismo sueño
desaparecido inmediatamente después de despertar.
no es mas que una continuación,
y el libro de los acontecimientos
se encuentra siempre abierto a la mitad.
Wislawa Szymborska (Premio Nobel de Literatura, 1996)
*La imagen corresponde a la película "Frankie & Johnny" del director Gary Marshall.
2 comentarios:
Hola Noe. El poema me recuerda a la idea del "universo como libro de Dios" que usa Borges en muchos de sus ensayos. JLB piensa que nuestros planes, nuestra vida entera ya están previstos en el sueño de Alguien que los ha soñado o en el libro de una divinidad que los ha escrito...
Beso.
Cris
Pues entonces, Cris, que no me dejen de soñar ni de escribir...que no te dejen de soñar ni de escribir...
Un abrazo!
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